1. DRAGON KHAN

El Dragon Khan es una montaña rusa situada en Port Aventura y es la más temida en España y de las más temidas en Europa. Es una montaña rusa enorme, con mucho recorrido. Cuando fuí por primera vez a Port Aventura estaba casi seguro de que me iba a montar en el el Dragon Khan, pero a medida que el tiempo pasaba y escuchaba los gritos de la gente desde de la atracción, me dió un poco de miedo. Sabía que era la mejor atracción y que me iba a encantar, aún así tenía mucho miedo. No pense lo que hacía, me subí directamente a la atracción y ya no había vuelta atrás. Cuando bajé del Dragon Khan me encontraba mareado pero realmente feliz pues la atracción había estado genial.

Cuenta la leyenda que el espíritu del malvado príncipe Hu de Pekín se reencarnó en el cuerpo del Dragon Khan, un temible dragón. Cada vez que un hombre intenta montar en sus lomos para domarlo, este, desata toda su ira, vueltas a toda velocidad, loopings y demás, harán de este viaje un gran desafío. Aparte que la montaña rusa es espectacular, está situada en la zona temática de China, justo al lado de un gran trozo del recorrido por la muralla china, de modo que las vistas a la atracción son espectaculares.

Una vez montado en el tren, el recorrido empieza en una curva a la izquierda con una leve bajada y subida para encarar el sistema de elevación por cadena que nos sube hasta la cima, situada a unos 45 metros por encima del suelo. Tras un giro a la derecha emprende una bajada en gran pendiente de 49 metros (nótese que baja más que su altura sobre el suelo) a una velocidad cercana a los 110km/h, suficiente para encarar uno de los mayores Vertical Loop del mundo, de 38 metros de altura. Acto seguido viene un Diving Loop, un Zero-G Roll, y un gran Cobra Roll. Después de estas 5 inversiones se llega a los frenos de seguridad en medio del recorrido. Una vez pasados los frenos el recorrido hace una bajada en curva pasando por debajo del primer Vertical Loop enlazando otro pequeño Vertical Loop y luego un giro de unos 270º muy peraltado por encima de las vías del tren a bastante altura para encarar los Interlocking Corkscrews, seguido de una curva de 180º para encarar los frenos finales, donde se reduce la velocidad para entrar de nuevo en la estación después de recorrer 1371 metros en apenas 1 minuto y 45 segundos y 8 inversiones.

 

Sinceramente, ser valientes y adentraos en la aventura más emocionante. si teneis miedo a este tipo de atracciones, os digo por experiencia que no sirve de nada y que no nos tiene que impedir montarnos en la montaña rusa. Asi que no tengais miedo y disfrutar, porque sino luego os arrepentireis y creerme cuando os digo que no vais a tener un momento así en toda vuestra vida.